Despacio, tejes tu tela de araña con paciencia.
Tus palabras
acertadas,
tus te quiero risueños,
tus sonrisas encantadas,
tus
abrazos en mis sueños….
….tu ser entero me atrapa en esta tela de araña
de aspecto frágil, pero de gran consistencia.
Cuando me dejo acunar
por la dulzura de tu acento,
cuando imagino tus manos en la suavidad de mi
piel,
cuando en la noche estrellada me pongo a contarte un cuento,
cuando
tu cuerpo y el mío dan vueltas en un carrusel…
….es cuando mis
pensamientos recorren cada uno de esos hilos entrelazados que me piden ya,
tenerte con urgencia.
A veces las telas de araña pueden ser
transparentes y sólo cuando has caído en ellas se activa la
consciencia.
Porque ahora, por mucho que luche por salir de tu abrazo,
vivo atrapada en tu tela de araña con complacencia.
Las teclas
del piano son blancas y negras,
pero suenan como un millón de colores en tu
mente.
Lo de las teclas del piano .....precioso y lo de la tela de araña.......fantástico.
ResponderEliminarUna tela de araña,aunque nos resulte bella y confortable , no deja de ser una """""""trampa"""""". Mejor verla y observarla desde fuera.
Un buen fin de semana y un abrazo Beatriz
Una trampa de la que, a veces, no queremos escapar.
EliminarSaludos
Vivir en esa tela de araña es siempre como un arma de doble filo, cuando estamos deliciosamente bien, desearíamos que fuese más y más consistente, pero, si nos damos cuenta de que necesitamos salir de ella... Es una verdadera dificultad lograr escapar de ella.
ResponderEliminarBesos!
Tienes toda la razón. En este caso es una delicia estar en esa red sutil pero muy efectiva.
EliminarSaludos