Formas, colores, espacios y texturas.
Vientos, soles, lluvias y
lunas.
Risas, lágrimas, besos y abrazos.
Penas, alegrías, temores
y fantasías.
Miradas, caricias, sexo y ternura.
Palabras, letras,
sonidos y cantos.
Libros, cuadros, cuadernos y fotos.
Playa,
nieve, montes y llanos.
Relatos, recuerdos, olvidos y
jácaras.
Compras, regalos, detalles y agasajos.
Subidas, bajadas,
horizontales y espirales.
Libertad, verdad, generosidad y bondad.
Dudas, ilusiones, proyectos y
fracasos.
Miedos, voluntad, esfuerzos y descansos.
Respeto,
libertad, compromiso y distancia.
Kilómetros, minutos, calendarios y
áreas.
Agua, frío, sudores y calores.
Saludos, despedidas,
silencios y charlas.
Amor, atención, amistad y cariño.
Todo
aquello que compartimos
lo llevo siempre conmigo,
aunque cada uno viaje
en su barca.
Yo sé que la vida no es un camino de rosas
por eso no quiero preocuparme más por lo que me hizo llorar
sino valorar lo que me hace sonreir.
@Escritos
Preciosa la imagen y estupendo tu equipaje, disfrútalo y compártelo, Ya contarás que comparten contigo. Un abrazo
ResponderEliminarEs precioso Beatriz, todas las palabras sencillas y juntas forman un precioso pensamiento.
ResponderEliminarUn abrazo.