lunes, 7 de noviembre de 2016

Esto no se-para


Tengo una tierra que me acoge como la más dulce de las madres.
Tengo un sol que brilla sólo para mí.
Tengo una luna que vigila mi sueño incluso cuando mengua.

Tengo un cielo sobre mi cabeza.
Tengo dos estrellas en lo más alto, que no dejan de animarme.

Tengo un ruiseñor que alegra mis despertares todas y cada una de las mañanas.
Tengo un amigo fiel que ve en mis ojos la pena sin necesidad de palabras.
Tengo una ilusión muy muy lejana.
Tengo quien siempre responde a mi petición de los auxilios más tontos.

Tengo abrazos esperándome, sin necesidad de dar nada.
Tengo un conjunto de simpatías ganadas.
Tengo un millón de experiencias cargadas en mi mochila.

Tengo vida para vivirla y salud para gastarla.
Tengo ilusión por compartir una vida pegada a mi almohada.
Tengo esperanza en el mañana…y en el pasado mañana.

Soy rica sin poseer nada.
Y lo comparto porque nunca sentí la necesidad de tener,
si no era para que los demás también ganaran.






Y muchas veces, aunque queramos, esto no se para.

Yo gano,
tú ganas,
ganamos los dos.







Mar, el poder del mar (escuchar pulsando)

Dices que vengo, que voy,
que siento, que escucho, que pertenezco,
que sirvo para mucho, que me estremezco,
que mi mirada es limpia, suave brisa,
que sientes el deseo de tenerme cerca,
que te distancias por miedo a perderme,
que el barrio es más hermoso desde que aparecí,
que soy la flor que alumbra el jardín.
El viento que se lleva la señora luna
para que luzca el sol, mi amor,
hoy sólo quiero decir ...

Siento lo mismo por ti,
el mismo sentimiento por ti.

Que sí, que sí, que bien,
que me encanta escucharte, adoro sentirte,
verte moverte y sorprenderte de pronto
haciéndote cosquillas en las rodillas.
Que sí, que sí, que bien,
que me encanta escucharte, adoro sentirte,
que el barrio es más hermoso desde que apareciste,
que hoy luce el sol en mi corazón.

Mi niña, mi amor, mi rayo de luz,
el camino que lleva a tu casa es mi alegría,
la primavera ha llegado a la ciudad
y no sabes lo bien que me sienta, mamá.
Los días tranquilos transcurren serenos.
Tus pasos, los míos, peinando el sendero.
¿Quién dijo que los muertos no iban a resucitar?
Hoy llego más puro que el agua mineral.

Tu cara, tu casa, tus ojos sonriendo, mi cara,
la brisa, la mañana, el sol por la ventana,
la calma, caricias, tu respiración,
resuenan campanas desde el comedor,
las nubes en el cielo y pasa un avión,
dibuja una línea blanca algodón,
tu almohada, tus ojos, tu mirada,
estoy en tu casa, adoro tu casa, cambio de color.

Pasa un avión, traza una línea, ahora de plata,
de plata la medalla del subcampeón,
hoy gano, tú ganas, ganamos los dos,
hoy gano, tú ganas, ganamos los dos,
hoy gano, tú ganas, ganamos los dos,
hoy gano, tú ganas, ganamos los dos,
hoy gano, tú ganas ...

Esto no se para,
esto no se para,
esto no se para,
esto no se para,
esto no se para,
esto no se para,
esto no se para,
esto no se para ...

2 comentarios:

  1. Preciosas posesiones, ganadas por buen comportamiento, logradas por el hecho de vivir, por defender la esperanza. Un canto que debería ser un himno. Un abrazo

    ResponderEliminar
  2. Tanta riqueza de sentimientos , te hace una bella persona Beatriz. Un placer volver a tu casa y sentir la ternura que acompaán tus letras .
    Un fuerte abrazo.
    Espero que estes bien.

    ResponderEliminar

Me harías feliz si dejaras aquí algo